EL PODER DE LA SOCIEDAD CIVIL.
En los actuales procesos electorales la
sociedad civil constituye la gran masa que con su voto decide las contiendas
democráticas, por este motivo es que es importante definir su voto a favor o en
contra de una corriente política determinada.
La sociedad civil generalmente no
participa dentro de una corriente política definida, no milita en un partido
político en particular pero es la que inclina la balanza en un momento decisivo
electoralmente hablando.
Si bien es cierto que
particularmente la sociedad civil no se encuentra dentro de ningún partido
político, no es menos cierto que, en alguna ocasiones, busca organizarse por
segmentos de acuerdo a valores sociales que le parecen más enriquecedores que
los que representan los partidos políticos, y es así como se constituyen
preferentemente en organizaciones no gubernamentales que luchan por x o
determinado ideal.
Así es como encontramos
organizaciones que luchan contra la violencia interfamiliar, o apoyan la
defensa del medio ambiente, o a favor de personas con enfermedades determinadas
o ciertas discapacidades, o que luchan por preservar los valores morales.
También existen organizaciones humanistas que pugnan por la fraternidad y la
paz mundial; en fin, la sociedad civil la podemos encontrar representada por
estas u otras organizaciones que luchan abiertamente a favor de la humanidad, pero independientes totalmente de
partidos u organizaciones políticas, que solo se constituyen para obtener
prebendas o cotos de poder.
Es indudable que la inmensa
mayoría de la sociedad civil no se
encuentra dentro de ninguna
organización, simple y llanamente se mantiene como una poderosa corriente de
opinión que en situaciones políticamente estratégicas hacen trastabillar a los
partidos más poderosos o fortalecen a los partidos más débiles, o actúan
en correspondencia con el partido o partidos que sienten más afín a sus
intereses del momento.
La sociedad civil sin embargo se
sigue organizando a su manera y continúa haciendo sentir, siempre, todo el peso
de su poder en los momentos decisivos.
En Estados Unidos el voto hispano fue fundamental en la victoria de Obama.
Actualmente los partidos
políticos más débiles, y aun los más poderosos, tratan de obtener las simpatías
de esta enorme masa que hace sentir todo el peso de su poder a favor o
en contra de determinada situación.
En el siglo pasado Richard M.
Nixon convocaba en su país a lo que el definía como la mayoría silenciosa, o
sea esa gran parte de la sociedad civil que sin pertenecer a un partido
político determinado muchas veces permanece indiferente a los llamados de uno u
otro instituto político, pero que cualquiera de ellos quisiera contar con su
peso electoral a favor.
En México organismos políticos abren
sus elecciones internas para
llevar más miembros de la sociedad civil a sus filas.
El ex-presidente de la
república Vicente Fox, en su campaña para llegar a la presidencia convocó en más
de una ocasión al voto útil, este fundamentalmente de la sociedad civil, para
lograr su propósito de derrotar al PRI en el 2000, objetivo que consiguió con
creces.
Próximamente se
realizarán, en el estado, elecciones
para definir presidentes municipales y diputados locales, y desde este momento
todos los partidos políticos se preparan
para obtener el mayor capital electoral que representa la sociedad civil. Esta
gran fuerza electoral no comprometida, a su vez observa y se prepara también
para inclinar la balanza a favor o en contra de x proyecto electoral, por eso
es importante que quien quiera obtener esos recursos electorales
debe de actuar en consonancia y tratar de atraer a su favor tanto a la masa
informe como a las organizaciones no gubernamentales que de alguna manera representan a esa aparente masa informe.
En Veracruz se debiera tratar de
iniciar un registro autentico de todas las organizaciones no gubernamentales
existentes a lo largo y ancho del estado, tratando de entrar en contacto con
sus dirigentes para lograr una identificación, no política sino cívica con
ellos en primer lugar, no con la finalidad de cooptarlos sino de ganar la
simpatía de los mismos hacia un proyecto de nación definido, que deberá ser
nacionalista, humanista y generoso, compartido en sus ideales y principios por
todos los que se sientan identificados con él.
En Xalapa, en estos tiempos, parece emerger una corriente ciudadana de la
sociedad civil, que busca participar en las elecciones municipales con
candidatos propios; si lo lograran podría ser un experimento innovador que le
daría un mayor interés al proceso democrático. Esperemos resultados.
En el 2005 existía en Veracruz un
registro de organizaciones sociales, no gubernamentales, que se levantó en el
año 2000 por la entonces subsecretaria de desarrollo político y que debiera de
actualizarse.
En ese registro se contemplaban 331 organizaciones sociales y no
gubernamentales divididas de la siguiente manera:
Organizaciones sociales: 101
Organismos no
gubernamentales: 58
Organizaciones
ambientalistas: 32
Organizaciones
agrícolas y productivas: 39
Organizaciones
religiosas: 69
Colegios, barras,
foros de abogados y asociaciones de profesionistas del estado de Veracruz: 32
No hay comentarios:
Publicar un comentario