El acercamiento político con Irán no dio rédito comercial Ampliar En Quito, 2011

El acercamiento político con Irán no dio rédito comercial Ampliar En Quito, 2011.  Durante la visita del entonces presidente Mahmoud Ahmadinejad al Ecuador. Archivo / EL COMERCIO TIEMPO DE LECTURA: 5' 20'' NO. DE PALABRAS: 862 NANCY VERDEZOTO F.  REDACTORA Jueves 28/11/2013 Las relaciones políticas entre Ecuador e Irán no se han traducido en una mejora de la balanza comercial ni tampoco en la concreción de los acuerdos y compromisos suscritos entre los dos gobiernos. Desde la llegada de Rafael Correa al gobierno, en el 2007, las relaciones con el entonces mandatario iraní Mahmoud Ahmadinejad se fortalecieron. El 2010 fue el mejor año para el Ecuador en el intercambio comercial. Según datos de Proecuador, el país exportó USD 8,3 millones, cuando solo importó USD 249 000. Sin embargo, este buen momento no fue sostenible. El 2011 las exportaciones se redujeron a USD 1,1 millones y en el 2012 cayeron prácticamente a cero. Según Cristian Espinosa, director ejecutivo de la Cámara Ecuatoriano-Americana, esta baja en el intercambio comercial se ha producido por los bloqueos y las sanciones económicas contra Irán que fueron impuestos los Estados Unidos, las Naciones Unidas y la Unión Europea, como una medida para frenar la supuesta financiación a grupos terroristas y por el desarrollo de un programa nuclear, que generaba temor en el mundo; en especial a sus enemigos históricos, como Israel. No obstante, señala que esta realidad cambiará con el actual gobierno de Hasan Rohani, quien se posesionó en agosto y ha emprendido una política internacional para contrarrestar lo hecho por su predecesor Ahmadinejad. Su primer paso hacia un acercamiento con Occidente fue la firma del acuerdo nuclear con el grupo de los países 5+1 (Estados Unidos, China, Francia, Reino Unido, Rusia y Alemania). En el documento, válido por seis meses, se limitan las capacidades de enriquecimiento de uranio y el desarrollo del programa nuclear iraní, a cambio de un levantamiento "limitado y reversible" de las sanciones y la liberación de una parte de los fondos iraníes que permanecen congelados en la banca internacional. Este acuerdo fue celebrado por el canciller Ricardo Patiño. "Vemos con optimismo el acuerdo para superar sanciones contra Irán, a propósito de su programa nuclear. Felicitaciones, por la paz mundial", escribió el ministro en su cuenta de Twitter. Este pronunciamiento, sin embargo, fue el primero que hiciera el Gobierno ecuatoriano desde la posesión de Rohani. A pesar de la distancia con la que Ecuador miró la transición en ese país, las relaciones diplomáticas se han mantenido sin ningún cambio. El último acercamiento que hubo entre las dos naciones fue en mayo, cuando el entonces vicepresidente para Asuntos de Relaciones Exteriores de Irán, Saeed Lu visitó el país. Él asistió a la tercera posesión del presidente Correa, en representación de Ahmadinejad. Allí dijo que la victoria del Mandatario ecuatoriano era un reflejo del fortalecimiento de los pueblos y recalcó la importancia que tienen las relaciones comerciales de los dos países en campos como la tecnología, medicamentos, energía y tecnología agro-espacial. En esa ocasión, Patiño habló de "continuar fortaleciendo e impulsando la relación comercial que se han ido construyendo con Irán". Pero esto no se tradujo en cifras. Según Proecuador, Irán compró al Ecuador en el 2011, banano, rosales, extracto de café, rosas y hojas para chapado de madera. Mientras que el país importó de Irán en el 2013, básicamente lana fina. Esta relación comercial tampoco se tradujo en inversión directa del país islámico al Ecuador. Entre el 2012 y el 2013 no hubo ninguna inyección de capital al país. Esto, a pesar de que el Gobierno de Correa buscó fortalecer los lazos con la nación asiática, incluso a pesar de las críticas mundiales que existían por la abierta política antioccidental de Ahmadinejad. Carondelet siguió la línea del expresidente de Venezuela, Hugo Chávez, quien era cercano a Ahmadinejad y donde se abrió un banco iraní, aunque tenía los bloqueos económicos mundiales. Como parte de esta política de acercamiento al Oriente Medio, en julio del 2008 Quito abrió una oficina comercial en Teherán. Esto se vio fortalecido con la visita que hiciera el presidente Correa a Irán en diciembre de ese mismo año. Ahora, con el cambio de Gobierno, de uno radical a uno "moderado", como lo han llamado los expertos, Ecuador ha preferido también bajar el protagonismo de esa relación y más bien visitar países con los cuales se mantiene una balanza comercial mucho más grande y que podrían constituir socios estratégicos para impulsar acuerdos de comercio multilaterales, como Francia y Rusia, donde estuvo el Jefe de Estado en su anhelo de cambiar la matriz productiva. La diplomacia Irán  abrió la Embajada en Quito en febrero del 2009, como reciprocidad a la misión diplomática de Ecuador en ese país. Irán, a pesar  de los bloqueos existentes, abrió dos cuentas, una de ahorros una corriente, en el banco Cofiec de Ecuador. Majid Salehí,  embajador de la República Islámica de Irán, realizó los depósitos en efectivo, por USD 5 00 000 y 1 360 000, el 15 y 24 de noviembre del 2011. Esto fue reportado como inusual, por los montos que se depositaron.

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